PATRIMONIO Y ESPIRITUALIDAD
Beatrice Magaya, RSHM
La resurrección consiste en que Dios nos muestra el significado del amor. Nuestro fundador, el P. Gailhac, quería que conociéramos este amor de Dios como sus hijas amadas. Escribe una carta a las comunidades en Pascua en la que explica cómo vivir cada día como personas resucitadas.
«…amemos a Jesucristo. El amor es vida y la verdadera vida es amor. El amor es transformación en Jesucristo y la transformación en él es resurrección …Amad a Dios con todo vuestro corazón y hacedlo todo por amor a él. En una palabra, mostrad que estáis verdaderamente resucitados…»(GS26/111/77/A*)
Resucitar es difundir el mensaje de esperanza y de amor. Queridas hijas de Gailhac, ¿cómo debemos mostrar que estamos verdaderamente resucitadas en Cristo y que le amamos? Haciendo diversas obras y compartiendo nuestros dones. Debemos mantener nuestro compromiso de vivir en pobreza, castidad y obediencia. Tenemos que amarnos, apoyarnos y ayudarnos mutuamente como hermanas.
El Papa Francisco expresó que el amor es la máxima expresión de nuestra fe. Mencionó que el amor se alegra de ver crecer a los demás. El amor es un salto del corazón; nos hace salir de nosotros mismos y crea lazos de intercambio y comunión. El amor social permite avanzar hacia una civilización del amor, a la que todos podemos sentirnos llamados. (Fratelli Tutti 183)
En este tiempo de la pandemia de Covid 19, estamos llamados a ser faros de luz y fuentes de vida. Debemos predicar el mensaje de esperanza, de fe y sobre todo de amor a todos. Debemos ser embajadores de Cristo resucitado en nuestro mundo actual.
«…que Dios sea bendecido en todo
en todas partes y siempre.
Vivamos o muramos somos del Señor
…mis queridas hijas amen a Cristo,
resucitad y transformaos en Jesucristo,
y que esto sea para siempre. Aleluya…
Os bendigo a todas, vuestro padre, Gailhac Superior»(GS11/V/75)
artículo en francés: